Graptopetalum Amethystinum - Guía de Cuidados
La suculenta Graptopetalum Amethystinum, también conocida como Rosa de Mármol o Lavender Pebbles en países de habla inglesa, es una especie originaria de los desiertos de México.
Por su belleza y dificultad para conseguirla, es una suculenta muy codiciada entre los coleccionistas.
En esta guía te compartiré toda la información que necesitas saber sobre las características, cuidados y reproducción de esta suculenta.
Características principales
- Iluminación: de sombra ligera a pleno sol
- Altura: crece hasta 15 cm de alto y 30 cm de ancho
- Sustrato: drenaje rápido
- Riego: normal
- Temperatura mínima: -2°C
- Reproducción: por semillas, retoños y esquejes de hojas o tallo
- Origen: México (Durango, Sinaloa, Jalisco, Zacatecas)
- Nombres comunes: rosa de mármol y lavender pebbles
- Precio: $5-15 USD
La Rosa de Mármol es parte de la familia de las crasuláceas. Crece en forma de roseta con hojas regordetas de tonalidades lavanda, rosa y verde. Llega a crecer hasta 15 cm de alto y 30 cm de ancho.
Durante la primavera y una parte del verano, produce flores en forma de estrella con colores que varían desde crema hasta amarillo claro en la base y tonalidades rojizas en sus puntas.
Cuidados de la Graptopetalum Amethystinum
Iluminación
Como cualquier suculenta con colores intensos – tonos rosados en este caso –, la Graptopetalum Amethystinum necesita de 4 a 8 horas al día de sol directo.
Sin embargo, si en el vivero donde la compraste la tenían protegida bajo una malla sombra o algo similar, es importante que no la expongas a esta cantidad de sol inmediatamente sino que la vayas aclimatando progresivamente, poco a poco hasta que se acostumbre.
Una vez que esté adaptada a estar en sol directo por varias horas, incluso puede aguantar el sol directo de mediodía sin quemarse, sobre todo en lugares donde el calor no sea muy extremo.
Riego
En cuanto al riego, la Graptopetalum Amethystinum es una suculenta que retiene mucha agua en sus tallos y sus hojas, que al ser tan gruesas logran almacenar una cantidad de agua considerable.
Por lo tanto, hay que tener mucho cuidado con el riego de esta suculenta para evitar que se pudra. Debes esperar a que el sustrato esté completamente seco antes de volver a regarla. Nunca la riegues si el sustrato todavía está húmedo porque muy probablemente comenzará a pudrirse.
Si quieres intensificar sus colores, puedes dejarla pasar un poco de sed pero sin dejar que se deshidrate. Por ejemplo, si normalmente la riegas cada 9 días, puedes esperar un par de días más entre cada riego y esto hará que intensifique sus colores rosados. A este proceso se le llama “estresar” a la planta.
Sustrato
El sustrato ideal para la Graptopetalum Amethystinum debe permitir un drenaje rápido para evitar el exceso de humedad, que como te mencioné anteriormente, es un problema muy común en esta suculenta por la cantidad de agua que retiene en sus hojas y tallo.
El sustrato, además de tierra común, debería incluir algo más suelto o poroso como grava, piedra volcánica o corteza de árbol. Esto evitará que la planta retenga mucha agua y ayudará a que sus raíces crezcan con facilidad.
En general, el sustrato promedio debería tener las siguientes proporciones:
- 50% de sustrato universal con humus de lombriz
- 30% de grava, piedra volcánica, corteza de árbol o una mezcla de todos
- 15% de turba o perlita
- 5% de arena de río
- Opcional: Un poco de cáscara de huevo molida y carbón activo de acuario para prevenir la formación de hongos
Por supuesto, las proporciones de cada material pueden variar dependiendo de la temperatura y humedad del lugar donde vives.
Además, si no te es posible conseguir todos los materiales, no pasa nada. Lo importante es siempre mantener un mayor porcentaje de materiales inorgánicos para que sea un sustrato ventilado, ligero, con drenaje rápido y no muy alto en nutrientes.
- Orgánicos: turba, fibra de coco, humus de lombriz, composta, etc.
- Inorgánicos: grava, piedra volcánica, perlita, vermiculita, arena, etc.
Adicionalmente, ayudará mucho tener la maceta con varios orificios para favorecer aún más el drenaje.
Temperatura
La temperatura ideal para la Graptopetalum Amethystinum es la misma que la mayoría de las suculentas. Esto significa una temperatura máxima entre los 21°C y 28°C durante el día y una temperatura mínima de 14 °C a 16 °C por la noche. Sin embargo, puede soportar temperaturas más altas y bajas.
La temperatura mínima en la que puede vivir sin tener mayores problemas es de 10 °C. Incluso puede llegar a soportar temperaturas de hasta -2 °C pero no de forma prolongada (no más de 2 o 3 días). Si se expone a estas temperaturas por más tiempo, lo más probable es que muera rápidamente.
Cómo reproducir la Graptopetalum Amethystinum
La Graptopetalum Amethystinum se puede reproducir o propagar por medio semillas, retoños y esquejes de hojas o tallos. Aunque los retoños y esquejes son la opción más común y las semillas han sido la opción menos utilizada ya que toma mucho más tiempo.
Reproducción por hojas
Aunque es un método más lento que el de esquejes o retoños, la Graptopetalum Amethystinum se puede reproducir exitosamente a través de sus hojas si se siguen las recomendaciones y cuidados necesarios para permitir un crecimiento sano y sostenido.
A continuación te explico paso a paso cómo reproducir la Graptopetalum Amethystinum por hojas:
- Desprende la hoja: Quita la hoja con mucho cuidado asegurándote que la desprendas completa desde su base y no se quede ningún fragmento en el tallo. Procura que sea de las hojas de más abajo. Desprende la hoja como si la estuvieras girando – de izquierda a derecha y viceversa –, de esta forma el margen de error es mucho menor que cuando simplemente la jalas con fuerza y en una sola dirección.
- Colócala en una maceta o recipiente: Coloca la hoja en una maceta o recipiente previamente desinfectados con alcohol. El sustrato debería tener por lo menos 4 centímetros de profundidad. Cuando pongas la hoja, colócala boca abajo para permitir que las raíces crezcan, que puedan penetrar debajo del sustrato y evitar que el sol les dé directamente.
- Pon la maceta en un lugar con luz indirecta: Aunque esta suculenta no tiene problemas con el sol directo en su estado natural (planta completa), cuando estás reproduciéndola por hojas no es recomendable exponerla, sobre todo en las primeras etapas de su crecimiento cuando sus raíces aún están débiles.
- Cubre las raíces y riega el sustrato: Cuando las raíces comiencen a crecer, hay que cubrirlas con sustrato y darle a la planta los cuidados normales: buena iluminación y riego cada que el sustrato esté seco.
- Si reprodujiste varias, trasplanta a macetas individuales: Con el paso del tiempo, la planta crecerá más hasta tener tallo y la hoja madre terminará por morirse y desprenderse. Una vez desprendida, si realizaste la propagación con varias hojas, será el momento de trasplantarla a una maceta individual pequeña para que continúe su crecimiento con más espacio. Si la propagaste sola, sólo retira la hoja madre para evitar plagas y continúa dándole los cuidados normales.
Nota: En caso de haber cortado mal la hoja y una parte de ella se haya quedado en el tallo, la reproducción no funcionará. Por lo tanto, deberás cortar otra hoja para reproducir y deshacerte de la que cortaste mal.
Reproducción por retoños
Cuando tiene las condiciones y cuidados adecuados, la Graptopetalum Amethystinum produce retoños pero no con mucha frecuencia. Estos son pequeñas plantas completas que crecen en la base de la planta principal o planta madre.
Sigue estos pasos para reproducir la Graptopetalum Amethystinum por retoños:
- Escoge los retoños: Procura elegir los retoños más maduros, que incluso ya tengan algunas raíces en el tallo. Estos retoños son los que podrás desprender más fácilmente y crecerán más rápido.
- Retira los retoños: Retíralos de la planta madre con mucho cuidado ayudándote de unas tijeras o cúter previamente desinfectados. Algunos retoños se desprenderán con sólo girarlos suavemente. En cualquier caso, siempre ten cuidado de no dañar las raíces.
- Siembra los retoños: Siémbralos en una maceta pequeña con sustrato universal para suculentas, una maceta para cada retoño. Para la mezcla de tu sustrato recuerda seguir las recomendaciones mencionadas anteriormente.
- Riega el sustrato: Debes regar el sustrato generosamente y esperar hasta que esté completamente seco para volver a regar. Algunas personas recomiendan regar con un atomizador durante las primeras 2 o 3 semanas, sobre todo en los retoños que no tengan raíces.
La temporada ideal para trasplantar los retoños es durante la primavera porque es cuando crecen y se reproducen más rápido. Sin embargo, no es una regla ni significa que no puedas hacerlo en otra época, simplemente crecerán más lento.
Este método, al tratarse de pequeñas plantas completas, es muy efectivo y permite que la planta se adapte a su nuevo hogar rápidamente.
Reproducción por esquejes
En esta suculenta, el método de reproducción por esquejes es el más efectivo porque suele dar raíces más rápido. Esto sin contar el método por retoños, que es un proceso natural y no podemos hacer mucho para controlarlo.
Para hacerlo, primero debes escoger bien el esqueje o tallo que cortarás. De preferencia elige uno que ya tenga su roseta de hojas bien formada y de buen tamaño para que el desarrollo de las raíces sea más fácil y rápido.
Una vez hayas escogido el tallo a propagar, córtalo con mucho cuidado usando un cuchillo, tijeras o cutter previamente esterilizados con alcohol.
Es importante que el corte del tallo sea horizontal para facilitar el proceso de cicatrización de la herida y una vez plantado en el sustrato pueda generar raíces más rápido. Una vez cortado el esqueje debes desprender las hojas de más abajo para dejar la base del tallo libre.
Como la herida queda húmeda, debes dejar secar el esqueje por 1 o 2 días hasta que se forme su callo. Es necesario que quede en un lugar donde circule bien el aire, no le dé el sol directo y que quede en posición vertical (colgando o sosteniéndose de algo) para favorecer el proceso de cicatrización.
Cuando ya esté cicatrizado el esqueje, pásalo a una maceta con sustrato y no lo riegues hasta 5 a 7 días después. Esto es para que el corte pueda seguir cicatrizando y salgan unas raíces más sanas y resistentes.
Después del primer riego, mantén la planta con los cuidados normales mencionados previamente.
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¡Un abrazo y lo mejor cuidando a tus plantas!
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